La empresa informó que ha implementado una serie de procesos para reutilizar y reciclar todos sus residuos.
La planta que la empresa Kimberly-Clark opera en Sitio del Niño, departamento de La Libertad, no generará desechos tras readecuar sus procesos para «reutilizar, reciclar y coprocesar el 100 % de sus residuos», según informó la compañía en un comunicado.
En la planta se fabrican papel higiénico, servilletas y toallas de papel. Estos productos se exportan a Centroamérica y el Caribe. La inversión anual de Kimberly-Clark para lograr una operación cero desechos asciende a $1 millón.
Para lograr sus objetivos a nivel ambiental, la empresa ha implementado procesos de diagnóstico para contabilizar los residuos que genera la planta e identificar cómo aprovecharlos, por ejemplo, con el compostaje de los desechos orgánicos.
Otras acciones están relacionadas con manejo de las aguas residuales, el control de las emisiones de dióxido de carbono, la eficiencia energética, así como la prevención de eventos ambientales.
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«En Kimberly-Clark celebramos este hito ambiental gracias al compromiso de nuestros colaboradores, quienes se han capacitado para realizar una separación correcta de los residuos, reducir los materiales no reciclables, hacer compostaje interno y coprocesar todos aquellos materiales que nos permiten mejorar los indicadores ambientales mensualmente y optimizar los recursos», comentó Sandro De Ponte, gerente de la planta de Sitio del Niño para Kimberly-Clark. La empresa explicó que el proceso de producción del papel higiénico los pañuelos faciales generan un tipo de residuo conocido como lodos de papel, los cuales representan el 75 % de los desechos generados en el proceso.
Para tratar estos residuos, en 2016 Kimberly-Clark «invirtió en un proceso de secado de lodos de papel para disminuir la humedad de los mismos y mejorar las características del material para su adecuado proceso», detalla el comunicado. Todos los lodos de papel se llevan a la planta de Geocycle El Salvador, donde son preprocesados y luego enviados a un horno de Holcim El Salvador, donde son coprocesados para incorporar su valor mineral y energético en la producción de clinker, materia prima del cemento.
Por Redacción de Economía | Recopilado de laprensagrafica.com el 15 de febrero del 2022
